Tal como estaba previsto, el Banco Central Europeo mantuvo hoy su tasa de interés en el mínimo histórico del 0%, tal y como se esperaba. “Las tasas han de ser bajas hoy para subir mañana”, aseguró el presidente de la institución, Mario Draghi. Además, el organismo mantuvo la facilidad de depósito en el -0,4%, la tasa principal de refinanciación en cero y la tasa marginal (la que usan los bancos para tomar prestado dinero al BCE en un día) en 0,25%.
En cuanto al programa de compras activos, el organismo lo mantiene en 80.000 millones mensuales hasta marzo de 2017, sin perjuicio de que pueda alargarse si la situación lo requiere.
“En relación con las medidas de política monetaria no convencionales, el Consejo de Gobierno confirma que las compras mensuales de activos por valor de 80.000 millones de euros continuarán hasta el final de marzo de 2017, o hasta una fecha posterior si fuera necesario, y en todo caso, hasta que observe un ajuste sostenido de la senda de inflación que sea compatible con su objetivo de inflación”, explicó el BCE.
En su tradicional rueda de prensa, Mario Draghi aseguró que el organismo discutió en su reunión las perspectivas económicas y otras cuestiones, pero que en ningún momento se habló de los cambios en la fecha final del programa de compra de activos.
Asimismo, Draghi también confirmó que el comité de la institución no trató ni “el helicóptero del dinero’ ni la compra de acciones. El banquero italiano consideró que el programa de compras de deuda pública y privada “funciona y deberíamos centrarnos en su aplicación”.
Previsiones macroeconómicas
En cuanto a las previsiones económicas, el organismo revisó una décima al alza su pronóstico de crecimiento para la zona euro en 2016, cuando la economía de la región se expandirá a un ritmo del 1,7%, frente al 1,6% estimado el pasado mes de junio.
Sin embargo, de cara a los dos años siguientes, el BCE revisó una décima a la baja sus previsiones. De este modo, tanto para 2017 como para 2018, la entidad proyecta un crecimiento del PIB del 1,6% en cada ejercicio, frente al 1,7% previsto en junio.
“Aunque la información disponible evidencia la resiliencia de la economía de la Eurozona, el escenario base sigue sujeto a riesgos a la baja”, dijo el banquero italiano, quien apuntó que previsiblemente la recuperación se verá afectada por el debilitamiento de la demanda externa. Aún así, el presidente del BCE subrayó que la institución sigue esperando que la recuperación de la Eurozona se producirá “a un ritmo moderado, pero sostenido”.
En cuanto a los precios, los nuevos pronósticos del BCE contemplan una tasa de inflación armonizada del 0,2% al cierre de 2016, en línea con los pronósticos de junio, mientras que el próximo año se situará en el 1,2%, frente al 1,3% previsto con anterioridad, y en 2018 llegará al 1,6%, en línea con el pronóstico precedente.
A este respecto, el presidente del BCE destacó que el repunte esperado de los precios hacia finales de año se explica en gran medida por efectos de base.