Otro era el panorama que se veía hoy en la bolsa de Brasil, tras un lunes en el cual pasó de todo, en lo que a la coyuntura política respecta. Finalmente –e inesperadamente, a decir verdad- el presidente interino de la Cámara de Diputados, Waldir Maranhão, el mismo que ayer tuvo al país en vilo al anular el impeachment contra la mandataria Dilma Rousseff, cambió de opinión y a la medianoche revocó su propia decisión. En sí, una desprolijidad más a un proceso que en cuanto a transparencia parece dejar bastante que desear.
No obstante, igual mucho futuro no parecía tener la medida original de Maranhão. De hecho, poco después de conocerse, el presidente del Senado, Renan Calheiros, ratificó que el proceso se mantenía en marcha y fijó que mañana la Cámara alta vote si finalmente abre la investigación por juicio político a la jefa del Estado. Recordemos que con que la Cámara Alta vote por mayoría simple la misma, Rousseff sería suspendida 180 días de su puesto. Hoy, los sondeos apuntan a que la posición favorable al impeachment es cómoda, con al menos 50 voluntades del total de 81 senadores. Claramente, más de los 41 que necesita.
De cumplirse ello, y de no existir novedades en las próximas horas judiciales –se habla de que el PT tendría su última esperanza en una acción del Tribunal Supremo-, el vicepresidente Temer sería quien ocupe desde el jueves la silla de Dilma. Temer, líder del PMDB y aliado hasta hace poco del PT, se dice que ya avanzó en la formación del que sería su Gabinete. Incluso se habla de que Meirelles podría ser su ministro de Economía. Igualmente, no esta demás decir, que Temer tampoco está exento de denuncias dentro del marco de la investigación por corrupción llamada Petrolao.
Dentro de este contexto, es una realidad que no sorprende la volatilidad con la que viene operando el Bovespa en la bolsa brasilera. De hecho, el índice ayer cerró más de 1% abajo, hasta los 51.009 puntos y hoy subía más de 2% y ya operaba por sobre los 52.000, lejos del mínimo de 37.000 registrado en enero y cada vez más cerca del máximo que a fines de abril, cuando alcanzó los 54.977.7 puntos. Así, en lo que va del año, acumula un avance de más de 20%.
“El mercado estaba descontando un proceso de destitución fácil y esto no está sucediendo”, había dicho en las últimas horas Win Thin, estratega de los mercados emergentes de Brown Brothers Harriman, justificando la volatilidad del índice.
De todos modos y a pesar de la buena rueda de hoy, la recuperación del Bovespa debería estar entre signos de interrogación, si tomamos en cuenta lo dicho por Enestor dos Santos, economista de BBVA, quien aseveró que “el proceso de destitución seguirá siendo turbulento e incierto”.
De hecho, el profesor de Derecho Luiz Flavio Gomes, sostuvo que “el país está polarizado y en ese marco la última trinchera será el Supremo”. En este sentido se dice que el Supremo –que tiene sesiones plenarias los miércoles y jueves- está llamado pues a desenredar un poco el tema, o en su defecto a complicarlo más.