S&P Global Ratings elevó la calificación soberana argentina a B, con tendencia estable.
Según explicó la firma en su comunicado, la decisión tuvo que ver con que Argentina está logrando avances para resolver varios desequilibrios macroeconómicos en el país, al mismo tiempo que reconstruye gradualmente su credibilidad y mejora el debilitado marco institucional en general.
“Esperamos que la inflación baje a 20% en 2017 y que siga una tendencia descendente gradual; también prevemos que la economía se recupere y crezca 3% en los siguientes tres años”, dijo S&P.
Puntualmente, la agencia subió las calificaciones crediticias soberanas de largo plazo de Argentina a “B”, desde “B-“y afirmó sus calificaciones de corto plazo en “B”. También subieron su evaluación de riesgo de transferencia y convertibilidad (T&C) a B+” desde “B-“. Al mismo tiempo, aumentó sus calificaciones soberanas en escala nacional a ‘raA+’ desde ‘raBBB’.
“Nuestra tendencia estable incorpora nuestra expectativa de que, en general, las políticas presentarán una amplia continuidad en los siguientes dos años. También considera la incertidumbre sobre el ritmo de implementación del plan económico correctivo del gobierno ante los actuales desafíos políticos”, sostuvo S&P.
El comunicado destacó, además, los avances logrados en la política económica en general para resolver los importantes desequilibrios económicos y restaurar la credibilidad de las políticas del país.
“El gobierno ha avanzado para mejorar la liquidez externa y su acceso al financiamiento comercial; logró realizar una emisión global de bonos por unos US$22.000 millones en 2016 y por US$7.400 millones en lo que va de 2017. Los pasos iniciales para resolver los grandes desequilibrios económicos del país y las distorsiones microeconómicas tales como la reducción de la inflación a un esperado 20% y 15% en 2017 y 2018, respectivamente, y el ajuste de las tarifas de servicios públicos a su costo subyacente, están ayudando a restaurar lentamente la estabilidad macroeconómica”, resumió la firma.
A su vez, explicó que la previsibilidad de las políticas ha mejorado y las instituciones se están fortaleciendo –por ejemplo, con el anuncio del gobierno sobre los objetivos fiscales de mediano plazo, que ha incrementado la transparencia y rendición de cuentas-.
Además, S&P explicó que el banco central también está avanzando para lograr cierta independencia mediante la reducción del financiamiento del gobierno central y moviéndose hacia un régimen de metas de inflación. También mencionó la reconstitución del INDEC, facilitando la publicación de información confiable sobre variables económicas clave.
“Nuestra tendencia estable incorpora nuestra expectativa de una amplia continuidad, en general, en las políticas durante los siguientes dos años. También considera la incertidumbre sobre el ritmo de implementación del plan económico correctivo del gobierno ante los actuales desafíos políticos. Asimismo, prevemos que el gobierno alcance gradualmente sus objetivos fiscales y de inflación”, concluyó el comunicado.