Apple Inc. dio a conocer el martes pasado su nuevo iPhone y en momentos en que las acciones de la gigante tecnológica ya acumulan un alza del 40% en el 2017, el dispositivo tenía que estar a la altura de las grandes expectativas. El máximo ejecutivo Tim Cook junto con otros ejecutivos subieron al escenario en el nuevo campus de Apple en Cupertino, California, para exhibir múltiples iPhone, un reloj habilitado con tecnología LTE y una versión mejorada del dispositivo de transmisión de video Apple TV.
Si bien las acciones de la compañía cerraron la jornada con una caída del 0.4% luego de concluida la presentación, Wall Street sigue estando mayoritariamente optimista.
Sin ir más lejos, Bloomberg entrevistó a varios analistas, quienes coincidieron con su visión positiva:
Michael Olson: “siendo el décimo aniversario del iPhone original, las expectativas eran que la compañía presentara un dispositivo con una serie de características mejoradas relativamente más robustas; creemos que Apple por lo general cumple estas altas expectativas. Más particularmente, señalaríamos el cambio en el factor de forma (pantalla OLED de vidrio sin bordes) y la percepción 3D (que permite el reconocimiento facial) como las mejoras clave”. “Recomendamos poseer acciones de Apple debido al potencial de un sólido ciclo de actualización del iPhone y una trayectoria favorable para los ingresos por servicios”. Mantuvieron la recomendación de sobreponderación y un precio objetivo de US$ 190 la acción.
Brian White: “las acciones de Apple no solo se beneficiarán del próximo ciclo del iPhone, sino también de la iniciativa de distribución de capital de la compañía, su valuación atractiva y sus posibles nuevas innovaciones. De este modo, no creemos que el alza de Apple terminará con el evento del iPhone del martes, sino que aún tiene un atractivo potencial alcista”. Mantuvo la recomendación de compra y un precio objetivo de US$ 208.
Gene Munster “El iPhone X tiene avanzadas tecnologías de percepción 3D, pantalla, cámara y realidad aumentada que nunca han estado disponibles en dispositivos de consumo. Estas tecnologías solidifican la plataforma en la que Apple mantendrá y aumentará su base de usuarios durante la próxima década”. “Esperábamos ver sensores avanzados de realidad aumentada tanto en el frente como en la parte trasera del nuevo dispositivo, pero los nuevos y avanzados sensores están relegados principalmente a la parte delantera del iPhone”. “IPhone X se despachará el 3 de noviembre, cerca de seis semanas después de lo que habíamos esperado previamente”, dijo. “Es probable que la fecha de envío no tenga un impacto significativo en la cantidad de unidades vendidas, pero postergará algunas ventas al trimestre de marzo”.
RBC Capital Markets, Amit Daryanani “El evento del martes marcó uno de los anuncios de producto más esperados de los últimos años y, desde una perspectiva del producto, la compañía no decepcionó. Creemos que el nuevo factor de forma y las nuevas características/capacidades de red (carga inalámbrica, habilitación de realidad aumentada, percepción 3D) incorporadas al dispositivo emblemático de la compañía llevarán a actualizaciones aceleradas del dispositivo dentro de la base instalada de Apple junto con una mayor actividad de cambio”. “Fundamentalmente, pensamos que la emoción en torno al nuevo factor de forma/características impulsarán una mayor demanda del aparato además de un cambio en la combinación de productos hacia el dispositivo de alta gama (US$ 999), lo que debería permitir uno de los ciclos más sólidos de iPhone en los últimos años”.
Mizuho Securities: “Junto con los anuncios del iPhone, el evento también incluyó actualizaciones del Apple Watch (ahora habilitado para celulares) y Apple TV, los que -a nuestro juicio- también son de carácter incremental. En general, con el consenso apuntando a un crecimiento del precio de venta promedio/unidad de iPhone de 6 y 14 por ciento -respectivamente- para el año fiscal 2018, advertimos un potencial alcista limitado para las estimaciones”. “Además, con la cotización de las acciones en torno a 15 veces las estimaciones de consenso de la ganancia por acción para el año fiscal 2018, creemos que la valuación refleja plenamente las sólidas expectativas”.
Bank of America Merrill Lynch: “El conjunto de características de los teléfonos fue impresionante, pero estuvo mayoritariamente en línea con las expectativas con una fecha de despacho posterior para el iPhone X (3 de noviembre). El iPhone X tiene un precio inicial de US$ 999 (64GB) y US$ 1,149 (256GB), lo que podría poner a prueba los precios relativamente inelásticos que Apple ha experimentado en el pasado.
“Estamos adoptando una visión más cauta respecto de las unidades (reduciendo cerca de 10 millones de unidades del teléfono de alta gama), pero un incremento promedio del precio de venta conduce a una mayor estimación neta de ingresos y ganancia por acción”. Mantiene la recomendación de compra y el precio objetivo de US$ 180.
Ahora bien, al margen de las opiniones por sus lanzamientos, Apple también fue noticia días atrás por otro motivo. Es que según Bloomberg, la compañía está en negociaciones para invertir alrededor de USD 3 mil millones en Toshiba, como parte de un consorcio liderado por Bain Capital, según fuentes al tanto.
De esta manera, Apple planea tomar una participación accionaria que podría llegar a 16% en un grupo que también incluye a Dell, Seagate Technology y SK Hynix, agregaron. Ese apoyo convenció a Toshiba de firmar un memorando de entendimiento con Bain y trabajar para llegar a un acuerdo a final de este mes, dijeron.
Apple está interesado en la unidad de chips debido a la importancia estratégica de las memorias flash. Los chips compactos son esenciales para sus iPhones e iPods, almacenando cada foto, videoclip y emoticón animado. Sólo un puñado de empresas hacen la tecnología más avanzada y el jugador dominante es Samsung.
Lo último que quiere Cook es terminar dependiendo de su archirrival en teléfonos inteligentes, por lo que quiere que la unidad de chips de Toshiba se mantenga saludable.
“Mucho de esto es el oportunismo”, dijo Mark Newman, analista de Sanford C. Bernstein en Hong Kong. “Si Apple está involucrado, entonces tienen algo más que decir en la estructura de la industria”.
Toshiba ha tratado de vender su filial de chips desde enero para cubrir las pérdidas en su negocio nuclear. La venta se ha retrasado porque Western Digital, un socio de la empresa conjunta con Toshiba en el negocio de chips, ha argumentado que tiene derechos en cualquier venta y solicitó un proceso de arbitraje en Estados Unidos.
Toshiba necesita recaudar el dinero para marzo para evitar que sus acciones sean retiradas de la Bolsa de Tokio. La empresa japonesa se negó a comentar.
Después de que Toshiba anunciara su memorando de entendimiento con Bain, Western Digital dijo que está “decepcionado” y que seguirá persiguiendo demandas de arbitraje. La compañía dijo este jueves que “lamenta” que Western Digital persista en exagerar sus derechos y que la empresa japonesa se compromete a completar la venta de chips para marzo.
“Western Digital ha estado jugando una campaña legal muy enérgica contra su socio, posiblemente aprovechando la angustia financiera de Toshiba”, dice Newman, “y una parte de esto es simplemente Apple interviniendo y diciendo: “Mira, ya es suficiente”.
Bloomberg.